En pleno desafío personal de alinear ego al alma, cuando unas cuantas batallas gana el ego llenándome de dudas y miedos se me acerca una amiga mía y me cuenta que le pican los mosquitos.

Hicimos la primera sesión de Códigos Luz de la frecuencia Turquesa y Zafiro antes de las vacaciones y no nos vimos bastante tiempo. Pues, me sorprendió mucho cuando al verme lo primero que me dijo fue :”Cuando te digo nunca es nunca”. No entendía de que me estaba hablando, pues abrí los ojos esperando más explicación. “ Nunca en mis 38 años me picaron los mosquitos y estas vacaciones me han acribillado. Es posible que hayan sigo los códigos? Ese paso podríamos saltar”. Al principio no supe que responderle porque sí me pareció posible que fueran los códigos. Cambian nuestro ADN, nos cambian por dentro. Y me sentí culpable (ya veis que mi ego últimamente me hace este tipo de jugadas) . Luego me reí por dentro porque pensé: Bienvenida al mundo de los humanos, nos pican los mosquitos, los tiempos de fingir la mujer de hierro se han terminado( que por cierto otra vez era cosa mía, no suya, porque yo misma intento ser una mujer de hierro). Pero después me pregunté cómo era posible que los mosquitos se enteraron que había cambiado, que ya no era la misma persona y que a ella, que se traduce literalmente a mi, pues mejor dicho y que a nosotras mismas nos costaba tanto verlo y entender?
En el marco de mi propio desafío con dudas y más dudas resulta que los mosquitos saben mejor. Y pienso que no se puede saltar ese paso. Si tú no te enteras siempre aparece algo que te lo muestre. Ya no eres como antes. Y no es cuestión de que la vida exterior cambia. Es que cambias tú. Y yo he cambiado con ayuda de los códigos. Tal como mi amiga. A ahora soy yo y solo yo que tengo que verlo y disfrutar.
Los mosquitos ya lo saben.

Os recuerdo que el sistema Crystal Turqueza y Crystal Zafiro está canalizado por Kai, quantumholoforms.com, y es apoyado y sostenido por los Maestros Lemurianos y por la consciencia de los cetáceos y las tortugas. Permanece en profunda conexión con el Corazón de cristal de la Madre Tierra y la consciencia galáctica solar.
Lo puedo hacer a distancia.