Después de pedir permiso para abrir el canal de comunicación vi a Susana (nombre inventado) conduciendo su coche. En un momento dado me di cuenta que su percepción se elevaba que empezaba a percibir todo desde arriba y aumentar el radio de su visión. Como si tuviera un radar. Sentí que por encima de su coche volaba un halcón que estaba directamente conectado con ella. El pájaro le dijo: “Vas a ver y sentir todo como yo para elegir bien el camino, para percibir por donde es mejor que vayas. Confía en mi, confía en tus percepciones. Puede que de repente sepas que hace falta girar. Pues, gira, no dudes. Estaré siempre contigo para que conduzcas segura. ”
Luego paso algo muy mágico. Las piedras crearon un espacio maravillo alrededor de ella y sobre todo convirtiendo el coche en un coche especial .Un coche mágico. Dijeron: “Te sorprende?( lo dijeron a mí porque me parecía demasiado maravilloso lo que veía) Antes los caballeros tenían sus caballos. Los cuidaban, los mimaban porque su vida muchas veces dependía de ellos. Ahora es el coche que va a llevar a Susana a su destino. Es poco para verlo como algo mágico? Cuál es el destino de Susana? Cada día otro. Lo que va a pasar dentro de su coche es de lo mismo importante. Saber callar las conversaciones cuando lo más importante es disfrutar del camino. Saber estar Aquí y Ahora. Eso se llama meditar. Estar plenamente presente. Lo que queremos mostrar a la Blanca es que cuando toca el volante toca y elige su destino. Le invitamos que conducir se convierta en su practica diaria de meditación. Es ella quien conduce. Es ella responsable de su vida. Es ella que conociendo las reglas se mueve. Está Aquí y Ahora. Observa plenamente. Está presente y dirige su vida.”
Las piedras junto con el halcón, el coche y Susana, crearon una esfera de energía llena de concentración, seguridad y consciencia.
Quién dice que el coche no puede ser mágico? Pues yo después de esa comunicación seguro que no.