Eres responsable de tus dones

Puedo hacer las comunicaciones a distancia con los minerales que tenéis en casa. Solo necesito vuestros nombres y apellidos y la foto del mineral. Como por ejemplo esta. Queréis saber que mensaje dejo a su dueña? Aquí tenéis toda la comunicación.

Después de pedir permiso para abrir canal de comunicación la vi a K. sentada en una rama de un gigantesco árbol. Lo sentía como si la linea oscura que atraviesa ese mineral era esa rama y toda la piedra sostenía la energía de ese maravilloso árbol. La sensación fue como si el árbol llenaba toda su conciencia. K. Estaba muy arriba pero miraba abajo sin ningún tipo de miedo. Era más bien una curiosidad. Quería ver que había abajo pero estaba demasiado arriba para percibirlo. Eso duró bastante tiempo y empecé a pensar que pasaría si el mineral no le aportaría nada más. Entonces sentí la voz que respondió a mi pensamiento pero se dirigió hacia K.: “Te doy el sustento, apoyo tu existencia para que te sientas segura pero la decisión de actuar tienes que tomar tú.” Me pareció como si los sentidos de K. se agudizarían. Empezó a percibir el entorno que la rodeaba de manera muy intensa, los olores, el vuelo de una insecto, los sonidos, todo era muy penetrante. Dijo: “No quiero ser bicho raro. Tengo miedo de que si voy por ese camino la gente no me entenderá, no me aceptará.”. La piedra le respondió: “ Te auto engañas. No es la gente que tiene que aceptarte. Eres tú misma. Tú tienes miedo de quien eres de verdad.. De todo el potencial que llevas dentro. Tú te limitas y te censuras. No es el gente. Ahora, aquí , interactuando nosotras dos, solo estamos yo y tú. Y eres tú quien no se permite ver y sentir más allá. Yo te acepto tal como eres. Y acepto tus decisiones, por eso no haré nada hasta que tú no te decidas a sentir tu verdadero poder. Nosotros, solo nosotros, somos responsables de nuestros dones. Nadie mas! Yo solo te apoyo para que puedas sentir cuanta vida te rodea.” K. cerró los ojos. Entendió que no se trataba de mirar abajo. Que todo lo que necesitaba ver la rodeaba en ese momento, en esa rama. Sintió la vida. Sintió como se fundía en la energía vibrante, sintiéndose uno con ella y al mismo tiempo manteniendo su conciencia como K. Su mente dejó de distraerle, dejó de buscar las etiquetas para nombrar lo que sentía. Ser ella misma, sentada en la rama del gigantesco árbol siendo el palpitante ritmo de la vida. Fue lo único que la importó en ese momento.

#piedrasquehablanysanan

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.