Quiero compartir con vosotros esa comunicación entre una cliente mía y un colgante de Riolita parecido al que veis en la foto.

Después de pedir permiso para abrir el canal de comunicación entre mi clienta y las piedras la vi en el bonito prado. Ella miraba alrededor como buscando a donde ir. La sentía un poco perdida e indecisa mejor dicho. Muchas direcciones le parecían bien y por eso no sabia a donde ir. Le pregunté como se sentía, y me pareció que me hubiera mostrado su corazón donde dormía un ratoncito. Oí la voz dulce y suave de Riolita: “Despiértate”. Pero ella no quería, como un niño que pide a la madre cinco minutos más. La Riolita insistía: “Despiértate”. Finalmente se despertó, y con desgana salió fuera. Allí se asustó. Gritó a la Riolita:” Para qué me has despertado cuando aquí fuera solo me espera peligro”. Y la Riolita le contestó:” Porque eso es la vida, con todas sus facetas. Mira….” Era un momento mágico, difícil de explicar… Estaba convirtiéndose en muchos animales, uno detrás del otro. Así, sentía que temía cada uno de ellos pero al mismo tiempo también que amaba y disfrutaba . Cuando terminó ese proceso, ya no era un ratoncito espantado sino ella misma, ella como es de verdad. Que bonita comunicación