Dicen
que las casualidades no existen. Pues, no puede ser casualidad que
últimamente, tanto durante las comunicaciones como las sesiones de
Códigos de Luz, veo la misma historia solo que con varias terminaciones.
Es la historia de las sirenas y los tritones. Los seres que nos
acompañan desde siempre encarnando también en cuerpos humanos. A veces
ni siquiera recuerdan quien son. Pero los veo como las sirenas o tritones. Y ahora se les da una oportunidad única. Ser ellos mismos.
Las sirenas siempre estaban en un umbral. Mostrando a las personas
donde estaba el portal para que pudieran decidir si lo querían pasar o
no. La función de las sirenas era de avisar a los que navegábamos por
los océanos de la vida para que no nos perdiéramos. Que mal se
interpretó su función! Y ahora es como si se hubiera terminado un gran
periodo de la oscuridad y hubiera llegado el momento de liberar a las
sirenas de su misión. Ya la gente puede ver los portales sola. Si
quiere. Las puertas ya están bien visibles. Pues, es el momento para que
las sirenas y los tritones puedan decidir si seguir con su misión o
vivir su propia vida.
Y he visto varias terminaciones de esa historia.
Sea lo que sea les deseo buen camino y les agradezco su trabajo.
No ha sido fácil.
En la foto el colgante de Fluorita con una preciosa sirena.