Anubis y Nephthys

En la ultima sesión del Reiki Egipcio que realicé aparecieron Anubis y Nephthys. Anubis estaba sentado, como si fuera nada en mi taburete tocando los pies de la persona y Nephthys la abrazaba con sus alas. Sabéis que Anubis es el hijo de Nephthys y Osiris?

“Nephthys sedujo a Osiris con el fin de tener un hijo y Anubis fue el resultado de esa unión. Lo que se nos dice en realidad es que, cuando se unieron los principios representados por los rayos de Osiris y Nephthys produjeron un tercer principio. Osiris representa la luz y la verdad, y Nephthys, la receptividad psíquica, la capacidad de revelación. Lo único que pretendían decir los magos egipcios con esa leyenda era que, cuando la luz y la verdad se unen con revelación, nace una fuerza que los guiará a través de las regiones oscuras y nos conducirá a la seguridad.”

Pues, no me sorprende que aparecieron los dos durante una sesión.

Las sesiones de Reiki Egipcio puedo hacer a distancia. Si algún día te apetece experimentarlo, escríbeme y te cuento todos los detalles.

Respeto

Los códigos Zafiro, sostenidos por la Tortuga Abuela, son una serie de frecuencias que se reflejan en las actitudes cuales al integrarlas en nuestro cuerpo cambian la visión del mundo que nos rodea.
Por ejemplo el Respeto. Os pongo un trocito de la canalización de Sanat Kumara hablando sobre el Respeto..

“Estamos viviendo la era de la Luz y con ello, llega el momento de crear la integración de la luz y la sombra en el interior.
Esa integración se logra a través del Amor, pero, una parte fundamental de la integración se logra a través del Respeto.
Y es que, cuando encuentras el Respeto hacia ti mismo y hacia los demás se abre la posibilidad de abrazar la vida, las historias y los momentos desde un desapego muy profundo.
El respeto te permite liberarte de la necesidad de controlar. Es cuando te liberas del apego y el control que se abre la puerta del perdón y entonces, puede ocurrir la reconciliación de aquello que parecía antagónico.
Respetarte a ti mismo, tu lugar, el espacio que ocupas, la misión que vienes a sostener. Respetar a los demás por lo que son, por el lugar que ocupan y la misión que vienen a sostener, son poderosas llaves hacia la iluminación de la consciencia. Pues el respeto conduce al no juicio, lo que abre la puerta del Amor.”

http://quantumholoforms.com/kai/activacion-de-los-13-pilares-de-la-consciencia-tercer-pilar-respeto/

Os recuerdo que el sistema Crystal Turquesa y Zafiro está canalizado por Kai,( quantumholoforms.com), y es apoyado y sostenido por los Maestros Lemurianos y por la Consciencia Cetácea y las Tortugas. Permanece en profunda conexión con el Corazón de Cristal de la Madre Tierra y la Consciencia Galáctica Solar. Si queréis saber más sobre esa sanación no dudéis en poneros en contacto conmigo.

Lemuria

Cada sesión de los Códigos de las frecuencias Turquesa y Zafiro me lleva de vuelta a Lemuria. Una isla que seguro que muchos de vosotros también recordáis.
“La Luna le susurraba a la Humanidad el recuerdo de aquella noche en Lemuria, cuando antes sumergirse en el olvido de la noche y las Aguas, una Humanidad guiada por el Amor cantaba con el propósito de no olvidar. Bajo la promesa del retorno las miradas se encontraban bajo la Luz de la Luna creando un memoria de Unidad.”

http://quantumholoforms.com/kai/activacion-de-la-tabla-de-vesta-quinta-capa-de-consciencia/

Si quieres saber más sobre la sanación con los Códigos de Luz de la frecuencia Turquesa y Zafiro no dudes en escribirme.
Sistema canalizado por KAI, Quantumholoforms.com,
Imparte Dorota Grzegorzewska tesorosdelatierra.es

Anubis

En una sesión del Reiki Egipcio al tocar el plexo solar vi la imagen de una anciana de aspecto indio (nada que ver con aspecto actual de la persona que recibía la sesión!) Tenía el pelo muy largo y canoso. Me miró y dijo: “Sé peinarme yo sola.” Y siguió haciéndose una trena muy larga. En ese momento apareció Anubis, dios asociado con la muerte y la vida después de la muerte en la religión del Antiguo Egipto.
Ella le miró y dijo: “ Soy demasiado vieja para tenerte miedo pero al mismo tiempo, soy también demasiado vieja para ignorarte”
Y él le respondió: “ Pues, quizás nos conozcamos?”.
Y empezaron a jugar a los dados.
Y asi juraron hasta que se terminara la sesión.
Pues, no parece tan espantoso encontrar el Dios de la Muerte. Solo hace falta ni tenerle miedo, ni ignorarlo.

Taller de Reiki de las Hadas

Reiki de las Hadas es una maravillosa modalidad de curación que es tanto un viaje para el participante como un conjunto práctico de herramientas para el sanador. Ese sistema crea un portal de acceso a Ávalon, la isla de los Manzanos y una apertura al mundo de las hadas.
Reiki de las Hadas fortalece la conexión con el Reino Elemental y los elementos. Ayuda a limpiar y liberar emociones negativas (Agua), conectarte con tu ser superior en busca de inspiración (Aire), liberar karma negativo y ayuda a manifestar sueños y metas (Fuego), proporciona conexión a tierra, equilibrio y estabilidad (Tierra) y ayuda a liberar la duda, miedo e ira (Éter / Espíritu).
En el taller emprenderemos apasionante viaje hacia Ávalon y sus secretos, hacia sacerdotisa- Morgana y el guerrero- Rey Arturo, hacia el en entendimiento cómo el mago Merlín se convirtió en el Alquimista Merlín y sobre todo hacia la magia de los elementos y los seres cuales los habitan. Aprenderemos y nos sintonizaremos con los cinco símbolos y un símbolo maestro para encontrar equilibrio y paz en nuestro cuerpo y hogar.

Imparten: Eva Ramisa Bernal y Dorota Grzegorzewska, Maestras de Reiki Usui, Celta, Egipcio y de las Hadas

Fecha: 10.11.18
Horario: de 9.30h a 13h
Precio: 53 euros

Nota: No es necesario estar iniciado en otro sistema de Reiki para acceder al único nivel que ofrece este sistema que es el de Maestría.

Confirma tu asistencia por correo: dorota@tesorosdelatierra.es o mensaje 639750721

Que la magia y las hadas nos acompañe!!!!

El camino se hace andando

minerales para el coche


Me pidieron ese conjunto para el coche pero después de conocer un poco más a F. pedí también que los minerales le ayudaran a “conducir” su vida. Este es su mensaje.

Después de pedir permiso para abrir canal de comunicación vi solo oscuridad. Para decir la verdad no vi absolutamente nada porque todo estaba completamente negro. Me pareció como si F. anduviera a tientas. Oír la voz de Turmalina Negra: “Nos pidieron que te acompañáramos a conducir tu coche y a conducir tu vida pero no sería más fácil que abrieras los ojos?”. No se me ocurrió eso. De verdad F. tenía los ojos cerrados!! Abrió los ojos un poco desconcertada como si ella tampoco lo hubiera sabido. Turmalina Negro continuó: “Mi energiza se sitúa en tus ojos para que puedes percibir lo que ves tal como de verdad es. Para limpiar tu visión de toda la negatividad. Puede parecer curioso que justo la piedra negra como yo te aporta la claridad. Pero funcionaré como un filtro. Por eso te llegará más luz gracias a mí. También despejaré tu tercer ojo. Que todo lo que te llegue a ti se ilumine. Así podrás ver el camino delante de ti. Muchas cosas que te parecían antes los obstáculos cuando los observes con la vista clara dejarán de serlo, convirtiéndose en el paisaje pintoresco que te rodea”.
Mookaita ya estaba impaciente para decir como quería trabajar con F. Los expresó de esa manera: “ Yo te daré la estabilidad. Es mucho más fácil andar cuando no tambalees. Bien equilibrada, tanto en movimiento como descansando aprovecharás mejor tus energías. Simplemente dejarás de temer el siguiente paso.”
Cuarzo Ahumado le pidió a F.: “ No mires a tras. Lo vivido, vivido está. Mira adelante! Todos nosotros estamos deseando acompañarte en tu camino. Pero “el camino” se hace andando. Soy la piedra de nuevos comienzos. Y te aporto el impulso para mirar adelante. No dudes más. Estás muy bien acompañada.”
Angelita también explicó cual era su función : “ Y yo borraré todos los “peros” . Siempre cuando te apetecería hacer algo pero aparece el contra pensamiento, “Sí, pero….” piensa en mí. Mírame, siénteme e imagina como borro como una super goma azul cualquier “pero” que aparezca!”
La Fluorita esperaba su turno para su mensaje. “ Yo te daré la fuerza de la voluntad. Hay que tener la iniciativa. Hay que actuar. No va a ser facial, ni rápido pero si conectas conmigo poco a poco recuperarás tu voluntad. Dentro de ti está durmiendo toda la fuerza que necesitas para actuar. Despiértala. Aquí estamos todos para ayudarte.”

Y así un conjunto para el coche se convirtió en un conjunto para la vida

Aliados

Las cosas mágicas que pasan cada día!
Cuando me pedís un colgante personalizado no suelo recurrir a los que ya tengo hechos. Pero hoy al pensar en un encargo levanto la cabeza y veo ese rayo de luz señalando ese colgante. La piedra siempre encuentra los aliados para poder llegar a quien desea acompañar.

“Sanación”

Estoy de vacaciones pero quería compartir con vosotros un trozo de la canalización que acompaña la meditación de activación de los Registros Planetarios. Me fue muy útil para reflexionas qué significa una “Sanación”.
“… Cuando tu Ser busca una sanación de las heridas del pasado es porque tu Alma desea recuperar la enseñanza que quedó atrapada dentro de la emoción. Cada experiencia porta consigo un aprendizaje, que no siempre es recibido o incorporado, debido a que la personalidad se queda apegada únicamente al dolor de la experiencia en si. La búsqueda de la sanación no es otra cosa que el deseo que el Alma tiene de recolectar la experiencia, para ubicarse a si misma en otro espacio evolutivo en el cual, aquella enseñanza ya se encuentre incluida, transformada en Sabiduría.
Por lo tanto, ante toda sanación siempre habrá una puerta que se abra generando la posibilidad de un cambio. Muchos de ustedes se han mantenido enganchados en la necesidad de esa sanación, es decir enfocados en el “pasado” sin darse la oportunidad de utilizar su energía para construir el presente y crear el espacio para la manifestación de aquello en lo que se desean convertir. Cuando pasas tanto tiempo de tu existencia enfocando tu energía en sanar lo que cargas, tus emociones se quedan enganchadas en ello. El proceso de sanar involucra un dejar ir. No solo deben enfocarse en sanar sus heridas, sino crear de una forma consciente el camino que deberá surgir a consecuencia de esa Sanación.
Sanar es cerrar una puerta cuyo interior ya cumplió su función y darse la oportunidad de caminar el sendero que se abre al frente, sin mirar atrás. Cuando permaneces mirando atrás es porque no has logrado recolectar completamente la enseñanza y eso se debe quizá, al orgullo espiritual, a no querer reconocerte a ti mismo en el otro. Aquí es cuando de nuevo, es necesario entrar en estado de “entrega y receptividad” pues en aquello que no puedes perdonar se encuentra el mayor regalo de la existencia, oculto bajo la máscara del dolor. Sin embargo, no es enfocando tu energía en sanar el dolor en si mismo que lograras integrar esa experiencia. Es enfocando tu energía en recibir la enseñanza, aun cuando la experiencia no se logre comprender por si misma. Para ello, conviene decretar ante toda experiencia dolorosa “Me permito recibir la Luz y el Amor que esta experiencia oculta” y permanecer en receptividad, hasta que la energía se haya liberado de la misma, sin esfuerzo.
…”
http://quantumholoforms.com/kai/proyecto-conciencia-solar-sexta-meditacion-mensual-el-rayo-arcoiris-de-integracion/

Tortuga Abuela

Quizás algunos os habéis preguntado alguna vez por qué la Tortuga Abuela es abuela? Seis madres cósmicas y entre ellas una que quiere ser abuela…
En una de las ultimas sesiones de Códigos de Luz oí su respuesta a esa pregunta que expresé en mi interior.
Dijo: “Porque a veces se necesita el abrazo de la abuela”. Así es, de simple y de sencillo.
Así está. En cada sesión de los Códigos de Luz de la frecuencia Turquesa y Zafiro nos acompaña Tortuga Abuela, con su amor de la abuela. Gracias!

Orcas

Para Kai y Ornai. Gracias.

Hace tiempo, entre las anaranjadas dunas de un país lejano, nació un niño. Un niño que desde la más temprana edad sabía escuchar a su alma. Su alma le susurraba durante las frescas noches del desierto que lo que había venido a hacer era “sanar”. Con cada despertar, cuando la cálida luz del sol abrazaba las dunas que rodeaban su pueblo sentía ganas de aprender. Tal como sentía los susurros de su alma, escuchaba a la gente porque entendía que detrás de cada historia estaba escondida la verdad . Y la verdad, sana.

Aprendió todo sobre las plantas, los animales, los minerales que podía encontrar en su cálido país. Escuchaba también todas las historias de los comerciantes que venían con largas caravanas o solos en sus sabios dromedarios. Supo que más allá de las dunas existían paisajes distintos, plantas distintas, animales distintos. Pero no se atrevía a salir de su casa. Pensaba que solo con escuchar las historias de otros sería suficiente para aprender a sanar.

Un día escuchó una historia sobre unos seres marinos inmensos que cantaban en las profundidades de los océanos. Aunque nunca vio el océano, podía imaginarlo . Era como su querido desierto pero con agua. De la misma manera mágico y peligro. Pero esos seres tan inmensos, no se los podía imaginar. Las ballenas. Cómo eran? Qué historias le podían contar? Fue el anhelo de conocerlas que le impulsó a emprender el largo viaje. Hasta las costas del océano.

Cuando finalmente llegó a un pueblo pesquero le contaron que las ballenas que más frecuentaban esa región eran las Orcas. Como en esas fechas todavía no estaban, tal como tenía por costumbre, dedicó toda su atención a escuchar las historias que le contaba la gente de ese pueblo. Todos aceptaron a ese extraño joven que vino desde el corazón caliente del desierto. Allí por primera vez le animaron a contar sus historias. Por primera vez fue él que contaba los infinitos cuentos que había memorizado durante toda su vida. Era muy feliz porque se dio cuenta que el compartir era la clave de sentirse pleno. Compartir las historias que fluían desde el inicio de los tiempos que no tenían ni dueño ni autor y de las que cualquiera podía ser el protagonista, le convirtió por fin en sanador.

Poco a poco entendió también porque la gente de ese pueblo veneraba tanto las Orcas. Para ellos eran las que acompañaban a la gente en el momento de la muerte. Contaban que en ese momento te caías en aguas negras. Que en tus pulmones ya no quedaba aire. Que el miedo se apoderaba de todos los sentimientos ahogándolos en el silencio. Y justo en ese momento de desesperación, de la presión que aplastaba el cuerpo y la mente, desde la inmensa oscuridad aparecía una orca. Sus manchas blancas te llamaban. Era lo único que podías ver porque todo el resto se había convertido en la más profunda oscuridad. La orca venía por ti justo en ese momento. Y de repente el miedo te abandonaba porque ya no estabas solo. Estaba contigo la gran orca. Lo que veías en ella era la luz que te iba a guiar a otro lado, donde la oscuridad era suave como el terciopelo. Lo que te trasmitía la Orca era la fuerza. La fuerza necesaria para vencer todos tus miedos. Abrazabas su enorme cuerpo y de repente entendías que no necesitabas el aire para vivir, sentías que no podías morir porque formabas parte de un todo. Veías en la Orca sus manchas negras y eran justo ellas que te atraían porque sabías que te podían llevar al Vacío donde todo tenía el inicio. La abrazabas y tu muerte se convertía en el nacimiento. Y ella te llevaba a la oscuridad tranquilo, seguro que estabas abrazando la vida, no la muerte.

Las personas no se acercaban mucho a las orcas. No querían que las llevasen antes del tiempo. Pero en cada casa de ese pueblo había una figurita de orca. Incluso cada persona durante su vida buscaba a “su Orca”. Intentaba adivinar su nombre, le hacía pequeñas ofrendas para conocerla y poder llamarla en el momento de su muerte, y no era el miedo sino el gran amor que sentían por ellas lo que las impulsaba a ello.

El chico escuchaba todas esas historias y cada vez le fascinaban más las orcas. Poco a poco aprendió a nadar. Y cuando vinieron las orcas a la costa estaba preparado.
La última vez que le vieron se acercaba a la playa. Y luego se fue.
En el pueblo prepararon una gran fiesta de despedida en la que comieron, bebieron, bailaron y rieron mucho. Y sobre todo contaron las historias que habían aprendido del joven chico del desierto. Se despidieron de él sin tristeza porque sabían que se había ido a escuchar y contar más historias. Porque detrás de cada historia se esconde la verdad. Y las verdad, sana.

Escrito por Dorota Grzegorzewska