Colgante de Cornalin a y Cuarzo

Colgante de Cornalina y Cuarzo

Cornalina
Es una poderosa protectora contra la envidia, la rabia y el resentimiento. Disipa la apatía y fomenta las elecciones de vida positivas. Aporta felicidad y alegría. Calma el enfado y disipa la negatividad emocional, reemplazándola por amor a la vida. Motiva para el éxito en los negocios y otros asuntos. Infunde coraje y claridad a la mente, ayudándonos a llevar a la práctica las ideas y planteamientos. Ayuda a confiar en sí mismo y en sus percepciones. Estimula la creatividad.
Cuarzo
Es el sanador y el amplificador de energía más poderoso del planeta. Actúa como profundo limpiador del alma, conectando las dimensiones físicas con la mente. Eleva la energía al nivel más elevado posible. Como contiene todos los colores posibles, el cuarzo claro opera a todos los niveles de ser. Potencia las capacidades psíquicas y le sintoniza con su propósito espiritual. Favorece la concentración. Activa la memoria. Potencia los músculos y protege contra la radiación.

Soy la noche de tus encarnaciones

colgante de mookaita y labradorita

“Soy la noche de tus encarnaciones donde tu brillas con cada una de las estrellas que fuiste.” Ese es el mensaje de una de las piedras que veis en esa foto. Me parece precioso. Os apetece leer toda la comunicación? Aquí la tenéis enterita.

Después de pedir permiso para abrir canal de comunicación vi a Z. trabajando en una mina. Fui el minero. Muy a la antigua, con pala y pico hacía un túnel. Le percibía a Z. muy contenta e ilusionada. Estaba en busca de un tesoro que, con toda la seguridad, sentía dentro de la montaña en la cual estaba trabajando. Las tres energías de los minerales la observaban junto conmigo. Como si representaba una obra de teatro. Lo mirábamos, mejor dicho, como algún partido porque estábamos en las gradas, comiendo patatas fritas contemplando cómo se esforzaba. Me pareció curioso que los minerales no hacían nada para ayudarle. Les pregunté si de verdad hacía falta que Z. se esforzaraba tanto”. Me respondieron: “Es que no nos da permiso.” Y siguieron comiendo patatas. Me sorprendí mucho. ¿Cómo es que no les daba permiso? Es que había pedido el colgante y comunicación. Respondieron: “Si, pero le parece que el esfuerzo es necesario. Que sin el esfuerzo no se puede conseguir los tesoros. Por eso estamos aquí esperando que nos llame.” Una vez más pedí al Yo Superior de Z. el permiso y le pedí que si de verdad ese era su deseo que se abriera a las energías de los minerales. Al principio sentí la Amatista cuya energía se situó en su plexo solar. Allí, dentro del chacra del plexo solar está situado el Disco Solar Portal Agua. Somos 70% agua. Agua que fluye sin esfuerzo, que se adapta. Agua que recuerda todo. La energía de Amatista primero borró los condicionamientos que la unían a Z. a la idea que había que escorzarse para merecer la recompensa. Eran ideas, comentarios, situaciones y los recuerdos de esta y de otras vidas. Z. cerró los ojos. Sintió el flujo de sus propias aguas. La facilidad con la que se movía y su liquida belleza.
La Mookaita se activó en su campo electromagnético. La rodeó de su “sentido común”. Le dijo a Z.: “Es que piénsalo bien! No necesitas esforzarte. Estás rodeada de abundancia. Pues, si es así , no es lógico malgastar tu energía haciendo agujeros con pala y pico. Vibro en tu campo electromagnético. En las semillas de los pensamientos. Para que desde el sentido común eligieras el camino fácil. Y sobre todo que entendieras que el camino es fácil.
Labradorita se situó en el timo. Vi a Z. en un palacio mirando las pirámides. Ese es el mensaje de su Labradorita: “Eres una mujer sabia. Siempre lo fuiste. Te conecto con tu sabiduría. Soy como el telón para las energías de Amatista y Mookaita. Para que puedas entender los sucesos de la vida a través de tu gran sabiduría. Te conecto con tus vidas pasadas que son como las estrellas. Soy la noche de tus encarnaciones donde tu brillas con cada una de las estrellas que fuiste.”
Z. abrió los ojos .Ya no estaba en la mina. Estaba en un palacio. Su vestido era precioso. Se levantó y con paso lento fue a una sala grande. Todo era muy luminoso y dorado. En esa sala en medio estaba un gran cofre. Z. sabía que ese era su tesoro. Y que para conseguirlo era necesario solo abrir los ojos y ver la abundancia y plenitud que la rodeaba.

Estás dispuesta a negar esa parte de ti misma?

Colgante de crisotila y la hoja de Ginko Biloba

Estás dispuesta a negar esa parte de ti misma? Esa es la pregunta de esa Crisotila. Lee todo su mensaje.

Después de pedir permiso para abrir canal de comunicación vi a D. como a una niña pequeñita en el bosque. Se parecía más a un hada que a una persona. Pensé que a veces a las hadas llaman gente menuda y así estaba D., muy menuda. Saltaba de una flor a otra y hacía equilibrios en las hojas que estaban en la tierra. Hacía sol precioso. Todas las plantas estaban bien iluminaba por los rayos dorados del sol. En un momento dado me pareció sentir que había una parte del bosque, mucho más oscura. Los árboles eran mucho más grandes y frondosos y no dejaban pasar la luz. Allí dominada la penumbra y sombra. Me pareció sentir le energía de Crisotita. D. sin mirarla preguntó: “Porqué piensas que debería ir allí? Estoy muy bien ahora. Tal como estoy. En plena luz. Porqué piensas que debería ir allí donde no tengo ni idea que puedo encontrar?.” La Crisotila le respondió: “Porque esa parte del bosque eres tú también. De la misma manera que lo que te rodea ahora. Mírame! Ves las lineas claras y brillantes? Son bonitas verdad? Pero imagina que desaparecen las partes verde oscuro! Serían de lo mimo bonitas? Sería yo de verdad? Son esas partes oscuras que me definen, que me dan belleza. Has pensado que allí, dentro del bosque frondoso y oscuro te puede esperar un tesoros? Y si allí encuentras tu verdadero poder? Si no te adentras en esa parte del bosque, ella siempre será desconocida para ti. Estás dispuesta a negar esa parte de ti misma? O, ya ha llegado el momento de quererte toda enterita, tal como eres?”. D. miró hacia esa parte frondosa del bosque. Preguntó a Crisotila: “ Y tú sabes que está allí? Me prometes que no me espera nada malo?” Crisotila la abrazó: “Solo tú sabes que está allí guardado. Nadie más. Solo tu puedes descubrir el potencial y los aprendizajes que te esperan allí. Pero yo estaré siempre a tu lado. Te daré la fuerza y valentía. Mis partes verdes te mostrarán el camino y mis lineas plateadas te guiaran de vuelta.” D. cogió de mano la Crisotila y empezó a caminar hacia la parte frondosa del bosque dejando detrás la luz del mediodía.

Una patada

ojo de tigre, cuarzo citrino

“ Siento mucho, pero mi función es darte de vez en cuando una patada”, eso dijo un Ojo de Tigre. Lee esa comunicación para conocer todo su mensaje.
Después de pedir permiso para abrir canal de comunicación vi a T. como a una rana. La miré sorprendida y me salió desde dentro la pregunta poco elocuente: “Y eso?”. Me miró y preguntó clavándome la mirada de sus ojos santones de la rana: “Qué?”. Hice un gesto mostrando su cuerpo y T, respondió: “ A , eso. Es que estoy esperando a un príncipe pero me parece que llega tarde. Quieres qué cambie de forma?” Yo seguí desconcertada y le respondí que yo era solo la comunicadora, y que ella hiciera lo que le daba la gana. T. me miró con esos ojazos llenos de la inocencia y me dijo: “Pues, me convierto en un felino…Qué prefieres un puna o un leopardo?” Yo repetí que no me lo preguntara porque, como me encantan los felinos y no quería interferir en la comunicación. Finalmente T. se convirtió en un leopardo y me dijo: “Sabes por qué me gustan? Porque suben al árbol y allí tan protegidos pueden tranquilamente comer y descansar. No se meten en problemas. Así de simple, un pedazo de gato en una rama. Eso me gusta.” Se activó la energía del Cuarzo Citrino. T. sintió su calor en todo su cuerpo. Como el abrazo del Sol. Se sintió muy bien. Yo sabía que a parte de lo agradable que era, también le portaba mucha información que ella recibía en su cuerpo físico. Sin diluirlo por los pensamientos. Mejor imposible. Pero en ese momento se presentó la energía de Ojo de Tigre. Y empezó a insistir que T., que en ese momento era un leopardo que disfrutaba plenamente del calorcito del Sol y su posición privilegiada encima del árbol, bajará a la Tierra. El Ojo de Tigre le dijo a T. que era la piedra que llevaba el equilibrio entre Sol y Tierra y que para hacerlo quería que bajara. A T. no le gustó nada la idea pero finalmente bajó y en el mismo momento de tocar con las patas la tierra se convirtió en una acacia. Me impresionó la facilidad de T. de adaptarse y cambiar de formas. Como la acacia sentía la conexión con la Tierra de manera muy profunda y al mismo tiempo simple y natural. Se sintió diferente pero también lo disfrutó mucho. El Ojo de Tigre conectó con ella y le preguntó: “ A qué si que es agradable?!”. Y T. respondió : “Sí, pero en otras formas también me sentía bien. Vale, como una rana esperando al príncipe quizás fue una tontería pero el leopardo me ha gustado mucho.” El Ojo de Tigre le dijo: “Ese es tu problema. Te adaptas con facilidad y eso hace que a largo plazo te estancas. Porque estás bien en cualquier situación. Pues, para qué moverte? Pero ves que en otras formas puedes experimentar cosas nuevas? Siento mucho, pero mi función es darte de vez en cuando una patada para que te muevas. Mira, tienes integrado la luz del Sol. Es tuyo. Es que el Cuarzo Citrino ni siquiera necesita decirte algo porque lo sientes en lo más profundo de tu ser. Y yo te ayudaré a mover esa energía. A crear. A transformar. Eso que te parece tan fácil , no lo es para todos. No todos se adaptan de la manera tan natural como tú. Disfruta de ese don. Cambia de formas! Date cuenta que eso te hace especial.”

Semilla Cósmica

serafinita, angelita, cuarzo

Después de pedir el permiso para abrir canal de comunicación vi a ti a toda la familia de G. en la playa. Sus hijos, Su pareja, incluyendo a su perro, padre y abuela que ya se habían ido. Todos estaban jugando y se sentía la felicidad y la gran sensación de paz y alegría. G. junto con su abuela estaba sentada mirando el mar. La abuela la abrazó y le dijo: “Mi energía siempre te compaña. Estaré en este colgante, en la Serafinita. Pero lo hago no para que mires atrás sino para que mires adelante, sintiendo el gran apoyo que te rodea. Te quiero dar alas. Por eso elijo esta piedra -Serafinita. Ella conecta con los ángeles, y físicamente, a veces, parece como si tuviera alas. Y la tuya tiene alas. Tus alas que te ayudo a desplegar. No mires a tras! Mira alrededor y mira adelante! Yo estoy delante de tus ojos, yo estoy en tus alas que despliegas.”
Me pareció que en ese momento la Amazonita creó delante de G., por encima de las olas del mar, un gran portal. G. Se levantó.
La gota de Cuarzo empezó a impregnarse de su esencia. Como si allí se plasmara su luz, su alma, su yo superior. Era impresionante como resplandecía y se llenaba de vida. Su vida. Durante ese proceso G cambió también. Fue tan luminosa que no podía yo ver claramente sus contornos. No sabia si se hubiera convertido en un ángel o un pegaso. Veía luz diamantina y unas grandes alas. G. emprendió el vuelo hacia el portal que había abierto y sostenía Amazonita. A través de el podía llegar a donde quería. A otros mundos, a otras estrellas. Me pareció sentir que era una semilla cósmica. Que la frecuencia de esa encarnación fue 5.5.1.
Ese colgante la acompaña en la aventura de recordar de donde viene. Con un caluroso abrazo de sus seres queridos, sintiendo su verdadera esencia, con un portal estable y seguro creado por Amazonita. Puede volar más allá del horizonte como una preciosa semilla cósmica.
Si queréis saber más sobre semillas cósmicas os recomiendo leer ese post de Kai
https://www.facebook.com/QuantumHoloforms/posts/2065644560129378

Una hechicera

colgante de cornalina y turmalina negra

Después de pedir permiso para abrir canal de comunicación vi a T. cabalgando en un precioso caballo. Le pregunté si sabía montar a caballo y me dijo que no pero le encantaría. Abrazaba el cuello del caballo muy feliz y contenta. Llegaron a un bosque. T. bajó del caballo y juntos entraron entre los arboles. El bosque era frondoso. Con cada paso se hacía más oscuro porque había tanta vegetación que tapaba la luz. En un pequeño claro del bosque estaba una persona. Era como la bruja de los cuentos para los niños, con la nariz puntiaguda, algunas verrugas. Estaba haciendo algo en la tierra. Como si intentara conseguir hacer algún hechizo pero no le salía. T. se sentó enfrente de ella, muy fascinada. La Bruja sintió su presencia y dijo bastante enfadada porque seguía sin conseguir hacer lo que pretendía: “Hoy no recibo visitas, vete!” Pero T. no se movió. De verdad no pudo moverse. Le pareció como si estuviera pegada al suelo y eso la asustó. La bruja repitió con creciente rabia: “TE DIJE QUE HOY NO RECIBO VISITAS, verdad?” Miró por primera vez a T. como si la reconociera. Su cara cambió. Se hizo todavía más maliciosa y dijo: “Vaya ,vaya vaya, a quién lo tenemos aquí?!!!! La Pequeña T. Mírala! Cómo está?!!!!” A T. no le gustaba nada la expresión burlona de la Bruja cuya su cara expresaba mucha ironía y desprecio. Pero siguió sin poder moverse. Tampoco sabía que decir. La bruja se levantó y con paso lento se acercó a T. Empezó a dar vueltas alrededor de ella. Le susurraba al oído: “ Tanto cuidar a todos, tanto cuidar a los animalitos. Y quien cuidará a la pequeña T?!” Aunque sentía yo que esa bruja de alguna manera era la misma T no me gustó como se desarrollaba la comunicación y pregunté a los minerales si no fue el momento de actuar. Efectivamente aparecieron en el mismo momento. La Turmalina Negra cogió de manos a T. que sintió una presión en la garganta. La Turmalina dijo: “Allí en tu garganta está un poderoso Portal Aire. Allí es donde expresas tu verdad, donde te creas a ti misma. Y a veces te faltas respeto. Te ves pequeña, cierras la boca, te sientes pegada a un sitio sin poder moverte pero de verdad es una ilusión. Respétate. Tu tiempo, tu espacio, tu cuerpo. Callas demasiadas cosas y por eso creas a esa bruja. De verdad es tu poder. Pero mira como lo disfrazas. Yo te ayudaré a expresar tu luz. Ahora mira a tu caballo, qué ves?” T. miró al caballo. Era bonito pero… era un caballo. No entendía que quería que viera la Turmalina. Lo miró otra vez. Y abrió la boca de la sorpresa. El caballo desplegó las hermosas alas. Era un pegaso. Cornalina le mostró a T. que la energía del pegaso estaba guardada en ella. La energía del claro de bosque comenzó a moverse. Un gran remolino de arco iris recogió a la bruja y a T. y cuando dejó de dar vueltas, en medio del claro estaba una T. nueva. La T. poderosa y hechicera. Miró a su pegaso , miró a si misma. Le gustó lo que veía. Sonrió y juntos continuaron el camino. Pero ya eran diferentes. No fue un simple caballo y una mujer. Fue un hermoso pegaos y una mujer que entiende su poder y su fuerza. Una hechicera que se respeta a si misma.

Ágata Árbol y hoja de Ginkgo Biloba

Ginkgo Biloba
Es el árbol sagrado para los chinos y japoneses, ya que se trata de una representación perfecta de la polaridad del Universo y la dualidad cósmica, del yin-yang. La dualidad está presente en toda su morfología, en las hojas, las ramas principales y en el tronco. También representa la inmortalidad, puesto que se trata de un árbol que, como especie, ha sobrevivido a todo tipo de contrariedades: sequía, polución, incendios, incluso superó la bomba atómica de Hiroshima. La gran longevidad de algunos ejemplares (entre 1000 y 4000 años) también ha contribuido a este simbolismo.
Según: “La energía de los árboles” de Albert Fargas

En la foto colgante de Ágata Árbol y hoja de Ginkgo Biloba
Ágata Árbol
Es conocida también como la piedra de plenitud. Trae abundancia y plenitud a todas las áreas de la vida, incluyendo los negocios. te presta perseverancia y la capacidad de ver las dificultades como un desafío. Crea un entorno pacifico, tanto interno como externo. Nos ayuda a caminar luminosamente por los paisajes de la vida, tomando tiempo para disfrutar cada momento. Nos conecta con la fuerza y la sabiduría de los árboles y ayuda a que nuestras raíces crezcan correctamente para que, en los momentos de máximo esfuerzo, no perdamos nuestro sostén interior ni el contacto con el suelo.

Soy tu enfermedad, mírame!

Después de pedir permiso para abrir el canal de comunicación vi a S. sentada trabajando en una oficina. Alguien o algo empezó a estirar su pelo. Primero poco a poco. Ella reaccionó como si fuera una mosca y sin mirar que era siguió trabajando. Vi a un tipo de duendecito feo que estaba a su lado y seguía estirándola cada vez más fuerte. Ella lo ignoraba todo el tiempo. Me pareció que el duendecito feo empezó a enfadarse porque creció un poco y se hizo todavía más feo. La estiró de verdad fuerte y le dijo: “ Soy tu enfermedad, mírame”. Ella lo oyó pero lo que había dicho el duendecitoo la hizo cerrarse todavía más, y aunque le dolía seguí trabajando como si no pasara nada, aguantando estos estiramientos casi llorando. En ese momento el duendecito no aguantó más. Dio una patada muy fuerte a la silla de S. Ella cayó al suelo. El duendecito se convirtió en un monstruo muy grande que empezó a gritar. S. en cambio se hizo muy pequeña, toda la oficina desapareció en un negro torbellino. En ese momento apareció la energía de la Rodonita. Como un mediador, calmó primero al duendecito, que volvió a ser pequeño, y llevó todos fuera. Los tres encontraron un prado tranquilo y verde donde se sentaron como en una terapia de pareja donde la Rodonita era el terapeuta. Le preguntó al duendecito si era posible que se fuera. Él dijo que no, que formaba parte de S. y no podía y no quería irse. Le preguntó si era posible que S. le controlara y el respondió que sí, solo tenia que verle. Rodonita le miró a los ojos a S. y le dijo:” Te ayudo a vivir con él. Lo puedes integrar como parte tuya, verle, aceptar y así no se hará más grande. Te ayudo en ese proceso. Pero tienes que aceptar que él es tú y que tú eres él.” La primera sensación de S. fue que no lo iba a aceptar nunca, que lucharía. Pero se dio cuenta que luchar no es lo mismo que no aceptar, de no ver a ese duendecito que ahora no parecía tan asqueroso. Dentro de ella empezó a crecer un llanto. Las lagrimas poco a poco empezaron a salir y se dio permiso a si misma a llorar a rendirse porque a través de la rendición podría de verdad aceptar que le pasaba y al mismo tiempo enfocar su energía en la vida y la alegría.
En ese momento sentí la energía de Fluorita que llenaba a S. Ella misma se convirtió en esa preciosa piedra, en esa energía de agua, de fluir, de aceptar y adaptase. Era muy intensa la influencia de la Fluorita. Le dijo a S. : “Siempre cuando me necesites, solo al sujetarme, te llenaré de esa paz infinita que sale dese la aceptación de los ciclos. No puedes retener el alguna que fluye. No puedes retener el tiempo. Acéptalo conmigo.”

Valora tu trabajo

Hace poco me he dado cuenta que no valoro mi trabajo. Y me pregunté por qué ? Mi conexión con los minerales es el resultado del trabajo, de la evolución lenta pero constante que a fin de cuentas no fue nada difícil. Y me pareció que eso podría hacer cualquiera con un poco de ganas y tiempo. Pues, como valorar algo que conseguí sin esfuerzo, solo trabajando y dedicando mi tiempo?
Ay, los seres humanos somos muy extraños, verdad?
Pues, hoy en día miro mi camino y lo reconozco. Miro años de trabajo y reconozco su valor. No nací siendo comunicadora entre los humanos y Reino Mineral. Me lo he currado. He despertado mis dones conscientemente. Y eso tiene su valor.
Los que lo leéis eso, mirad bien su vida! Reconoced vuestros logros. Todo lo que habéis conseguido por poco que os parezca es muy grande. No lo olvidéis nunca.
Si tú mismo no valoras tu trabajo, nadie lo va a hacer.

Eres fuerte como un roble

Quieres saber cuya energía se manifestó a través de esas piedras? Abajo comparto contigo la comunicación.

Comunicación entre D. y el colgante de Crisoprasa y Ojo de Tigre.
Después de pedir permiso para abrir el canal de comunicación vi a D. como si hubiera caído desde arriba- sin hacerse ningún daño solo creando una gigantesca nube de polvo- encima de un pupitre como en las antiguas escuelas. Miró alrededor muy sorprendida. Había niños sentados como ella, vestidos de batas, atentos mirando la puesta. Se miró a si misma y sorprendida todavía más se dio cuenta que era una niña como los otros no una mujer adulta. Se abrió la puerta y entró Jesús. Eso ya era demasiado. D. abrió la boca de lo extraño que le pareció todo eso pensando que no era real lo que veía. Jesús la miró como si hubiera oído tus pensamiento y dijo: “Por qué estás tan sorprendida? Siempre estoy a tu lado.” Y mirando a todos los niños añadió: “Chicos! Salimos fuera, allí estaremos mejor.” La siguiente imagen era muy idílica. Debajo un gran roble estaba sentado Jesús abrazando a D. Otros niños disfrutaban de la naturaleza. Veía muchas mariposas, flores, sol. Jesús puso la mano en el corazón de D. De repente ella sintió mucha pena y dolor. Empezó a llorar, sin saber bien como nombrar las emociones que salían junto con sus lagrimas. Pero esas lagrimas la liberaban de toda pesadez que albergaba en su corazón. Como los niños que a veces no saben decir que les pasa pero con un simple hecho de permitirse llorar se liberan de toda la tensión, ella también con cada lagrima derramada se sentía más ligera. Hasta poder respirar profundamente sabiendo que ya no hacía falta llorar más. Jesús todo el tiempo tenía la mano en su corazón, la miraba a los ojos. Su energía se mezclaba con la de Crisoprasa. Le dijo a D.: “A través de esas preciosas piedras acaricio tu corazón. Cuando vas a tocarlas recuerda que estoy allí, que te doy mi mano. Que te apoyo en cada instante.” Estaban debajo de un gran roble que en ese momento también expresó su energía diciendo: “Los tres piezas de Ojo de Tigre representan mi fuerza, una de ellas son mis raíces, otra es mi tronco y la tercera mis ramas. Te trasmito la sabiduría de la Tierra y de tus antepasados, la solidez de estar aquí y ahora con un tronco fuerte y estable , y la caricia del viento y sabiduría del universo que te viene a través de mis ranas y hojas. Eres fuerte como un roble. No lo olvides. ”